Washington, Estados Unidos. Misteriosa, reservada, cauta. Una mujer que no duerme con su marido y habla a través de su ropa. La primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, está decidida a ser ella misma y no necesita que nadie la salve, asegura una biografía no autorizada. Así la presenta Kate Bennett, la corresponsal de la CNN en la Casa Blanca que cubre a la esposa del presidente Donald Trump, en su libro “Free, Melania” (Melania, libre), que sale a la venta en Estados Unidos el martes. La exmodelo nacida en Eslovania “ha luchado contra el estereotipo de que es distante, huraña, incluso de que está ‘atrapada’ en la Casa Blanca, como lo sugirió la etiqueta #FreeMelania, que generó memes” en las redes sociales, dice Bennett. “Cálida a veces, otras con cara de piedra”, la espigada mujer de 49 años sigue generando interrogantes tres años después del triunfo electoral de su marido, un magnate inmobiliario de 73 años con quien se casó en 2005. Pero Bennett advierte que está