Raúl de Molina va con la policía y el FBI por problema con Juan Rivera

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Luego de que Juan Rivera hiciera público su número de celular y le lanzara una seria amenaza, Raúl de Molina no se quedó de brazos cruzados y acudió a una cita con la policía y sus abogados e incluso pensaba hablar con el FBI.

Raúl de Molina rompió el silencio tras la boda de Chiquis Rivera y todo el alboroto que se armó en torno a El Gordo y la Flaca, en una entrevista con la revista People en Español.

El conductor de El Gordo y la Flaca aseguró que luego de que Juan Rivera reveló su número de teléfono, a los medios de comunicación presentes a las afueras de la ceremonia religiosa de Chiquis y Lorenzo, su teléfono no ha parado de sonar y tampoco ha dejado de recibir mensajes.

“En el programa que más mencionan a Chiquis y a Lorenzo es en El Gordo y la Flaca, entonces no entiendo por qué hacen esas cosas. ¿Por qué si le dieron la exclusiva a Telemundo, por qué tienen que estar cubriendo esto? Por mí no hubiera cubierto nada de la boda”, aseguró el famoso conductor a People en Español.

Cabe recordar que, luego de compartir el número de celular del ‘Gordo’ de Molina con la prensa, Juan Rivera lo publicó en su cuenta de Instagram.

En Instagram, Juan Rivera también amenazó con revelar el número de Mía, la hija de Raúl de Molina, así como de su compañera Lili Estefan y de la productora del programa, Mariela Cardona. Aunque para este lunes la publicación ya había sido borrada.

Por eso, De Molina tomó la decisión de consultar a sus abogados y acudir a la policía.

“Tengo una junta con la policía a las 2:00 de la tarde y con los abogados, la policía dará un informe de todo lo que pasó en donde yo trabajo, que es Univisión, y se va a reunir conmigo. Llamé al FBI y veré qué es lo que me dice”, agregó ‘El Gordo’ durante la entrevista.

Mientras Juan Rivera alega que El Gordo y la Flaca no respetó la privacidad de la familia en un evento que querían privado, porque así lo pidió Chiquis Rivera, Raúl asegura que dar a conocer la invitación de la boda al aire no fue algo ilegal.

“El programa decidió poner la invitación en el aire, pero se han puesto varias invitaciones en el aire y eso no es ilegal”, dijo el conductor cubano.

Además, Raúl de Molina recordó que él fue muy amigo de la fallecida Jenni Rivera: “Esa mujer me llamaba a mí dos o tres veces por semana. Y a la familia que le damos tanta publicidad (no es justo que) nos pague de esta manera”.

El conductor se refiere no solo a su información personal filtrada en redes, sino también a la agresión que sufrió el camarógrafo del programa a las afueras de la recepción de la boda, donde guardias de seguridad supuestamente lo tiraron al piso y le escupieron, lo que terminó con varias personas arrestadas.

“Y no creo que eso termine ahí, creo que va a haber más, hay una investigación con la policía”, aseguró Raúl de Molina.

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